37 millones de euros para aire fresco en las escuelas

Múnich/Stephanskirchen - La escuela primaria Otfried Preußler de Stephanskirchen (distrito de Rosenheim) es pionera: esta semana, Petra y Wolfgang Schabus, directores de una empresa de ingeniería eléctrica del municipio, presentaron un semáforo de dióxido de carbono desarrollado por ellos mismos en el patio de la escuela. Pasa a amarillo a partir de una concentración de más de 1000 ppm (partes por millón) y a rojo a partir de 2000 ppm; a más tardar, es necesario ventilar hasta que el semáforo vuelva a ponerse en verde. "Es un recordatorio visual", dice Petra Schabus. El semáforo ha sido vendido por la empresa desde 2009, hasta ahora principalmente a empresas. Ahora debería haber un nuevo mercado de ventas: las escuelas. La escuela primaria local ya ha dado el paso: ha pedido 30 dispositivos (precio unitario de 345 euros).

A partir de ahora, los ayuntamientos pueden solicitar a los gobiernos de distrito el reembolso de los costes de las inversiones para la "ventilación a prueba de infecciones" - la directriz se envió ayer y también está disponible para el "Münchner Merkur". Según la directiva, la compra de un semáforo de CO2 se subvencionará con 7,27 euros por alumno. Los dispositivos de purificación del aire también están subvencionados, con un importe máximo de 3.500 euros por habitación.

Neubiberg invierte 100.000 euros

Es probable que la necesidad sea grande. Varios municipios ya han hablado de estos dispositivos. Neubiberg, por ejemplo, quiere gastar 100.000 euros en dispositivos de purificación del aire en sus dos escuelas primarias. En el consejo municipal, Christian Kähler, de la Universidad de las Fuerzas Armadas Alemanas, había presentado su investigación sobre la filtración del aire en interiores y recomendado la compra de estos dispositivos. En Otterfing (distrito de Miesbach) se van a adquirir seis aparatos de medición de dióxido de carbono. El distrito está planeando otras compras, pero antes de hacer un pedido mayor de los limpiadores de aire, mucho más caros, que también habría que sacar a concurso, el consejo del distrito quiere comprobar las directrices de financiación.

Sin embargo, se definen condiciones muy estrictas para el apoyo financiero de los purificadores de aire: La directriz establece que los dispositivos de purificación del aire se considerarían "principalmente" para las aulas y salas de profesores que "no pueden ventilarse suficientemente en el sentido del plan marco de higiene para las escuelas abriendo deliberadamente las ventanas...". Sin embargo, las salas sin ventanas (o con ventanas muy pequeñas) son raras en las escuelas. Un experto escolar declaró al "Münchner Merkur": "Sólo por razones de seguridad contra incendios -para salvar a los niños en caso de necesidad-, la mayoría de las aulas escolares tienen ventanas. La directiva es estrecha de miras.