Bailar bajo la lluvia en lugar de la danza de la lluvia
Seguro que todo el mundo lo ha experimentado al menos una vez: en estos momentos, en los meses de julio y agosto, el verano es a menudo cálido e incluso caluroso, y muy seco. Ni una nube de lluvia nubla el cielo azul. Como jardinero, no se puede seguir cargando con las regaderas, y los agricultores vuelven a quejarse de las malas cosechas a causa de la sequía. El peligro de incendios forestales también está aumentando: lo oímos continuamente en las noticias.
Así que un buen chaparrón o incluso una tormenta de verano vienen bien, ¿no?
Por un lado, sí, pero estas condiciones meteorológicas encierran otro peligro en el que quizá no pienses inmediatamente: lluvias torrenciales con cantidades de agua extremadamente altas en un espacio reducido, es decir, al menos 25 litros por metro cuadrado en una hora.
El suelo, seco y endurecido, no puede absorber tanta agua rápidamente, y nuestro sistema de alcantarillado no está diseñado para esas cantidades. Los pequeños arroyos pueden convertirse rápidamente en ríos embravecidos, y el agua "estancada" en la superficie busca su camino hacia zonas más bajas, como el hueco del sótano o el hueco de la escalera.
En otras palabras, exactamente donde no queremos ni podemos utilizarla.
Según un estudio publicado en el número actual de la revista científica Nature, es probable que en el futuro aumenten las inundaciones causadas por fuertes lluvias en el noroeste de Europa.
https://www.nature.com/articles/s41586-019-1495-6
El Servicio Meteorológico Alemán lleva registrando eventos de lluvia intensa y continua desde 2001. Por definición, deben llover al menos 25 litros por metro cuadrado en una hora, o 35 litros en 6 horas. Las cantidades de lluvia en 12, 24, 48 y 72 horas también se registran con dispositivos de medición por radar. Aunque es menos preciso, es más completo que el registro exclusivo a través de las estaciones meteorológicas, ya que estas lluvias torrenciales suelen producirse de forma muy localizada.
El hombre inteligente toma precauciones:
con los detectores y sensores de agua SCHABUS, somos alertados inmediatamente en caso de penetración de agua - y aún podemos tomar medidas de protección a tiempo, antes de que los daños sean mayores - por ejemplo, cerrar compuertas y válvulas contra el reflujo de aguas residuales del sistema de alcantarillado, cubrir ventanas de sótanos y pozos de luz o protegerlos con sacos de arena - así como las entradas de las casas a nivel del suelo.
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